Nabor Sandoval Díaz
La nueva tortura, los nuevos códigos; La
Narco-semiótica.
¿Qué entender por una imagen violenta? Aquella
que perturba que transgrede lo habitual, que desnuda los temores, lo finito, el
deseo, la fragilidad, parece ser que toda aquella imagen que nos revela el
destino final y apela la consciencia de la vulnerabilidad.
Llevada al paroxismo la narcoviolencia que se
expande por todo el país tiene un sello aterrador, el de la tortura como
sistema, cuyas altísimas dosis de perversión dificultan los intentos por hallarle
una explicación a este fenómeno por comprenderlo de una manera más racional…
enviar mensajes a los enemigos y eventualmente desmoralizarlos en sus
estructuras físicas, morales y de poder.
Los variados métodos de tortura, aplicados por
los carteles mexicanos de la droga, que por lo regular terminan con la
ejecución de las víctimas, se realizan con instrumentos rudimentarios, lo que
habla de un retorno al salvajismo más primitivo y sanguinario extendido ya a
todo el país.
La mutilación el degollamiento, la lapidación o
la decapitación son sólo algunos de esos procedimientos que se realizaban en
diferentes épocas y lugares, hoy han sido retomados por el crimen organizado y
se han vuelto tan comunes que ya conforman una expresión mas de la llamada “cultura
del narcotráfico”.
Esto me llama la atención ya que con las
ganancias multimillonarias que deja la droga, los carteles utilizan
instrumentos tan arcaicos como el mazo, el palo, el hacha o cuchillo. En
ocasiones se incorpora la electricidad o los ácidos que vienen a suplir el
aceite o el agua hirviendo que se usaba en la antigüedad, pero por lo general
los instrumentos son muy primitivos, un ejemplo recogido de mi experiencia fue
el tiempo que estuve enrolado en el ejército en el estado de Tamaulipas, ví hombres y mujeres masacrados
a hachazos y mazazos.
“Esta gran innovación” que han hecho los
carteles mexicanos, es aplicar la mutilación a una o varias personas para luego
matarlas de una forma o manera que pareciera que están diciendo algo ¿y de
verdad lo hacen? hay un nuevo código para esto una llamada narco-semiótica.
Esta serie de piezas llegan a mi a través de lo
que me toco vivir un; pedacito de “guerra” contra el crimen organizado, es un proyecto que parte de formas e
imágenes así como metáforas, que quedaron grabadas en mi memoria y se convirtieron en parte de mi experiencia e
imaginario.
Fue
en base a lo que viví durante diez meses que estuve en el ejercito, en un
batallón de artillería ( 7º batallón de artillería). Todo esto repercutió hacia
Una ruptura sobre la percepción de la realidad; cruda, dura y fría un encuentro a
lo que puede llegar a ser el
hombre, un encuentro de primera mano con la violencia con la tan llamada
narco-violencia.
Mi proyecto trata sobre esto. Es parte de las
labores que tenia que hacer en le ejercito en Tamaulipas (para ser exactos)
realizábamos labores de patrulla, exploraciones de zonas urbanas y zonas
serranas, en estas actividades se podían encontrar vestigios del paso de la
“guerra” en algunas veces cadáveres torturados de maneras que solo la
imaginación tiene los limites, muerte, abandono y desesperanza, provocada por
el crimen organizado y sus pugnas, así como choques con otras unidades de las
fuerzas del orden, el titulo se deriva de esto por los mensajes y de cómo me
enseñaron a leerlos y mas aun como
mi mente los asimilo.
Lo que planeo hacer (y lo que he realizado) es una representación de
ejecuciones simbólicas, pero con objetos esto para hacer referencia a ese
sentimiento y preocupación que el ser humano ve a sus semejantes como objetos,
una simple pieza mas y aquí en base a los recuerdos e imágenes apropiadas que
viví, planeare a objetos como si
se trataran de personas
caracterizare a esos objetos como si fuesen personas y haré alusión a
las ejecuciones y maneras de cómo quedan los signos de la narco-semiótica
El
material responde y los objetos expresarán lo que busco para poder manifestar mejor lo que pretendo,
aunque la posibilidad de hacerlo
con objetos de tamaño real, objetos verdaderos ya establecidos solo que descontextualizarlos
y plantearles el discurso de ejecutados y exaltación de la violencia, esto bajo
una serie de signos que se están reconociendo y que aprendí estando en ese
contexto, se puede llamar una especie de semiótica de la violencia, una
narco-semiótica es decir una serie de signos que desprenden de una ejecución
por ejemplo que significación tiene que a un hombre le corten las manos, un
dedo, la lengua etc.
La violencia seguirá y podré continuar trabajando sobre ella, lo que me sucedió pero mi camino a seguir y a donde me llevo mi proyecto fue a la ruta de mi imaginario como soldado esta será mi nuevo campo de manifestación el sueño de un niño soldado, por eso experimentare nuevos materiales y formas de escultura conceptual como el ensamble de juguetes de plástico por citar un ejemplo.
Bibliografía:
Política y poética de las imágenes de guerra.
Antonio Monegal compilador. Paidós. 2007
La jaula de la melancolía: identidad y
metamorfosis del mexicano, México, Grijalbo, 1987,
Rene Girard La violencia y lo sagrado,
Traducción de Joaquín Jordá, Anagrama, Barcelona, 1983MORRIS, C. (1938):
Fundamentos de la teoría de ls signos, Barcelona, Paidós, 1988.
"La perdida del orgullo"
Tecnica mixta,
medidas variables
Nabor Sandoval Diaz
2011
"El dedo"
Silla Intervenida,
medidas variables
Nabor Sandoval Diaz
2011
"Pensamiento bélico"
Ensamble de soldados de plástico,
20cmx30cm aprox.
Nabor Sandoval Diaz
2011
"Pensamiento bélico"
Ensamble de soldados de plástico,
20cmx30cm aprox.
Nabor Sandoval Diaz
2011
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